ASATE

TRATAMIENTOS

El paciente con un tumor cerebral debe ser sometido a una terapia específica, y a un tratamiento para el alivio de los síntomas: dolores de cabeza, crisis convulsivas, pérdida de funciones motoras, sensitivas, etc. En cuanto al tratamiento específico, en la actualidad, se realiza mediante la combinación de tres herramientas terapéuticas: la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia.

"En la actualidad, los cirujanos tienen cada vez más éxito en la extirpación de tumores cerebrales."

Nuevo tratamiento disponible en España

TTFIELDS

La tecnología y la investigación han desarrollado, los TTFIELDS constituyen una nueva modalidad de tratamiento para los tumores sólidos que utiliza campos eléctricos, administrados a través de un dispositivo portátil, con el objetivo de ralentizar e invertir el crecimiento del tumor.

Está aprobado en Estados Unidos, Europa y Japón para el tratamiento del glioma de alto grado. Las investigaciones han demostrado que los TTFields pueden prolongar la supervivencia y mantener la calidad de vida cuando se combinan con quimioterapia después de la radioterapia en pacientes con glioblastoma recién diagnosticado.

Los pacientes llevan un dispositivo portátil que funciona con baterías y que genera campos eléctricos de baja intensidad que interfieren en la capacidad de crecimiento y división de las células tumorales. La reacción adversa más frecuente es la irritación de la piel de leve a moderada.

Cirugía

En la actualidad, los cirujanos tienen cada vez más éxito en la extirpación de tumores cerebrales. Esto se debe, en parte, a las nuevas tecnologías de las que se dispone en los quirófanos, especialmente las que permiten generar imágenes del cerebro en tiempo real, que guían al cirujano durante la operación. Ejemplos de estas tecnologías son los dispositivos estereotácticos, que ayudan en la localización exacta de los tumores al proveer imágenes tridimensionales del cerebro; la tomografía axial computarizada intraoperativa, la cual guía a los médicos para ver más de lo que queda expuesto durante la cirugía y les permite distinguir con claridad el tejido sano del tejido del tumor; y otros sistemas que guían con imágenes con el fin de permitir un mejor reconocimiento de la zona.

Después de la cirugía, el único tratamiento necesario, en ciertos tumores, es la observación (controles periódicos y estudios radiológicos para verificar que no hayan surgido problemas). En muchos casos, sin embargo, es necesario el uso de la radioterapia, la quimioterapia o la combinación de ambas.

RADIOTERAPIA

Al igual que la cirugía, la radioterapia ha cambiado considerablemente durante la última década. La existencia de tecnologías asistidas por computadoras ha permitido a los profesionales la construcción de campos de radiación tridimensionales que atacan el tejido del tumor pero, al mismo tiempo, eluden las estructuras críticas del cerebro, como los centros de la audición.

QUIMIOTERAPIA

Respecto a la quimioterapia, se utiliza cada vez más en el tratamiento de algunos tipos de tumores cerebrales. Por ejemplo, conjuntamente con la radiación, se ha convertido en la norma de tratamiento en relación con los tumores cerebrales malignos primarios. El uso de estos medicamentos o sustancias químicas hacen más lento o matan las células de reproducción rápida, y se pueden usar antes, durante y después de la cirugía y/o la radioterapia para destruir las células tumorales y evitar que vuelvan.

NUEVAS VÍAS EN INVESTIGACIÓN

Por último, en la actualidad, otro tipo de terapias, como los anticuerpos monoclonales, están adquiriendo relevancia en el manejo de los tumores cerebrales. Así, existen nuevas vías de tratamiento en investigación, algunas ya muy avanzadas, con antiangiogénicos, y que están ofreciendo nuevas esperanzas a las personas que padecen un tumor cerebral.